Ibai se puso en
contacto con nosotros para mostrarnos su trabajo y la verdad es que nos
alegramos mucho por ello. El resultado que ha conseguido con esta Honda CB 250
trasformada a "Street Tracker" es sin duda un gran trabajo.
Ibai llevaba
tiempo buscando un proyecto. Algo barato y sencillo. Algo que si los resultados
no fueran los esperados no tengas que colgarte de un árbol por haber destrozado
una moto y a la vez haber perdido los pocos ahorros con los que todos contamos hoy en día. Un
día pasó por el taller de un amigo y allí estaba parada una Honda CB 250 que su
antiguo dueño ya no quería. Su amigo se la ofreció por muy poco dinero y siendo
una moto sencilla y barata cumplía con las premisas básicas para convertirse
en el nuevo proyecto de Ibai.
En un primer momento
la intención de Ibai fue construir una Cafe Racer, pero pronto se dio cuenta de
que aunque seguramente también se pueda construir una Cafe sobre esta base de
forma económica, por lo general, se termina invirtiendo más dinero del que uno
tenía pensado. Ya hemos comentado antes el problema que tiene la Honda CB 250 y
este es el subchasis y la viga trasera del chasis. Se puede modificar, si
claro, como todo lo demás, pero eso implica más tiempo y dinero. Mientras
barajaba las posibilidades Ibai se dio cuenta de las enormes cualidades que
este modelo ofrece para otros estilos de trasformación sin demasiados cambios.
La Honda CB 250 ofrece una buena base y sencilla para construir una BratStyle o
una Street Tracker como en este caso. Tras unos bocetos e ideas la decisión
estaba tomada y la Honda se convertiría en una Street Tracker sencilla y
económica. Ibai compro por internet una "U" para el subchasis y
deposito replica de Honda CG 125 de los ´70s. Un amigo le regalo un manillar
Renthal, consiguió nuevos intermitentes, foco estilo bates y un nuevo
velocímetro. También fabrico una caja de batería y una base para el nuevo
asiento a medida.
Fue entonces
cuando Ibai llevo la moto a un taller amigo. Dicho taller es DUETT Garage. Los
chicos de DUETT ya tenían experiencia en trasformar motocicletas, por lo que
este nuevo proyecto no les venía grande. Con todas las piezas listas solo
tuvieron que adaptarlas y pintarlas para que la Honda luciese como se merecía.
El motor se ajusto
y se coloco un nuevo filtro más abierto por lo que los carburadores también se
ajustaron a las nuevas exigencias. Lo más complicado fue adaptar el depósito,
que al ser una replica china no venía muy bien rematado. DUETT se encargo
también de esconder el sistema eléctrico en la caja de batería que Ibai había
construido y de fabricar el asiento a medida. Para la pintura eligieron un
color azul intenso para que destacase sobre la base negra del resto de la moto.
Como detalle pusieron un vinilo traslucido amarillo en el foco, dando le un
pequeño pero vistoso toque clásico.
Ibai se encargo de
juntar todo lo necesario para el proyecto y DUETT Garage de su montaje y
terminación. Un trabajo en equipo que ha devuelto la vida y nuevos días de
gloria a una maltrecha Honda CB 250 que ahora rueda por las calles como una preciosa
Street Tracker.
No hay comentarios:
Publicar un comentario