domingo, 12 de octubre de 2014

BMW K1600 "NURBS" by Fred Krugger

BMW K1600 "NURBS" by Fred Krugger
BMW K1600 "NURBS" by Fred Krugger
BMW K1600 "NURBS" by Fred Krugger
BMW K1600 "NURBS" by Fred Krugger
BMW K1600 "NURBS" by Fred Krugger
BMW K1600 "NURBS" by Fred Krugger
BMW K1600 "NURBS" by Fred Krugger
BMW K1600 "NURBS" by Fred Krugger



Fred Krugger ha ganado por segunda vez el AMD World Championship o Mundial de Constructores Custom. 

La motocicleta con la que se ha subido a lo más alto del cajón, su "NURBS", es una petición de BMW Motorrad para desarrollar un prototipo entorno al poderoso motor de 6 cilindros en línea que monta la BMW K1600 capaz de desarrollar 165 CV y 175 N/m de par. Tras unas 3000 horas de trabajo Fred Krugger ha sido capaz de desarrollar una moto única de estilo "Art Deco" basada en los años 30 y los comienzos de la aerodinámica en la era industrial.  El nombre de "NURBS" es el acrónimo en ingles de "non-uniform rational B-spline", un modelo matemático utilizado en la representación de formas orgánicas complejas por ordenador.

El motor, la electrónica, los amortiguadores, el cardan y el basculante son los elementos que se han mantenido de la K1600 original, el resto de los componentes han sido creados por Fred para la ocasión. El reto era desarrollar una moto tecnológicamente avanzada y con una estética vanguardista e innovadora.  En parte, el concepto estético está basado en la BMW R7 "caza records" pero con las líneas más depuradas y adaptadas a los nuevos conceptos de diseño. El color gris se eligió para resaltar los atributos del poderoso bloque motor. Pese a su delgadez y su compacta carrocería, pese a que aloja los radiadores en sus laterales, el asiento trasero puede trasformar se y junto a la incorporación de unos reposa pies adicionales permiten  que otro pasajero pueda disfrutar del viaje.  Además, bajo el asiento se oculta el depósito de combustible. La autonomía se ha mantenido en 250 km, lo que sin duda es una gran ventaja.

Con este proyecto Fred Krugger ha elevado el listón que conjuga la tecnología y la estética a un nivel casi de escultura.

Gracias a Thierry Dricot por la cesión de las fotografías.

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