Estuvimos hablando con los chicos de Kruz Company, un taller de Bruselas en el que Brise y Oliver "El Almirante" modelan motocicletas inspirados en sus propios gustos, sin grandes preparaciones pero con mucho estilo y pasión.
Sobre esta Yamaha
XS 400 Custom, su primera creación, tuvieron que emplearse a fondo con la
restauración. Como es habitual al trabajar con motos clásicas no siempre se
consiguen en buenas condiciones. Con el motor agarrado y mucho oxido, se pusieron
manos a la obra para devolverla a la carretera.
El motor se
restauro por completo y se colocaron filtros K&H de dirt-track y unos
silenciosos tipo megáfono que satinaron en negro. Para el depósito de gasolina
se uso el de una Honda CB 125 que tuvieron que modificar para hacerle encajar
en el chasis de la Yamaha. Para la parte trasera del chasis recortado colocaron
un "kick up" ligeramente elevado y un guardabarros corto. El asiento
fabricado en cuero con dos tonos de color encaja a la perfección con la
tonalidad de la moto. Las llantas que eligieron de los años ´80 le dan un carácter
retro que conjuga muy bien con los toques modernos que ellos mismo han dado. La
tapa del alternador serigrafiada con su nombre, el mecanizado de la tapa del piñón
de salida ó los paneles laterales agujereados le dan ese toque moderno que te
dice que estás ante una "new-retro". El freno de 320mm delantero también
ayuda a esto.
El carácter urbano
de esta moto se refleja en una posición cómoda de conducción con un manillar
Renthal de dos alturas al que le recortaron las puntas para poder moverse mejor
entre el trafico de la ciudad. Junto a un pequeño foco y un mini velocímetro la
parte delantera se completa al estilo Scrambler.
Un gran trabajo de
los chicos de Kruz Company.
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